LÍMITES
“Soy dueño de mis límites”, se dijo, al
romper el cascarón.
AVANZANDO
Al ver que no podía caminar, abrió las
alas y voló.
HIPOCRESÍA
Haciéndose el muy digno, el chulo la
parasitaba sometiéndose a sus reglas.
LIDERAZGO
Mansos, se dejaron guiar por un cerdo. Y
fueron felices comiendo basura.
ESPACIO CURVO DE EINSTEIN
Los dos extremistas antagónicos se fueron
alejando fanáticamente hasta converger en el mismo punto.
©2013 PSR